sábado 18 mayo 2024

Recomendamos también: Mikel y las buenas conciencias, por Gil Gamés

por etcétera

Decíamos ayer. La gran sorpresa de esta elección ha sido Mikel Arriola, candidato del PRI a la Jefatura de Gobierno de Ciudad de México. Arriola presentó su candidatura como un funcionario responsable y honesto que no se merecía contender para ser arrasado en la elección. Arriola parecía además un hombre sensato y decente, en el Seguro Social lo hizo bien, en la Cofepris, igual. Resulta que Mikel Arriola tiró la sensatez y la decencia por la ventana. Algún genio le aconsejó que podría ganar los votos panistas de la ciudad si se oponía a los matrimonios del mismo sexo y a la adopción de parejas del mismo sexo. Así lo hizo y su campaña se convirtió en un muladar conceptual. Ahora mal sin bien: Mikel Arriola encabezó la “Marcha por la vida”, organizada por todos los opositores al derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo y la interrupción del embarazo, que en la capital del país es legal desde hace 11 años. Mikel estuvo feliz de marchar “con personas que piensan como yo, con la defensa de la vida desde el momento de la fecundación”. ¿Un cuartito de Tafil? ¿Tres gotas de Rivotril y dos mentadas de madre?, digo, para no dejarle todo a la mansedumbre de las benzodiacepinas.

Gil leyó con los ojos de plato y plata a las organizaciones que convocaron a la marcha, oiga usted: Pasos por la Vida, el Frente Nacional por la Familia, Provida y otras bellezas del fanatismo. Las señoras y los señores de la marcha exigieron “respeto a la vida desde la concepción hasta la muerte natural”.

El jai alai de la política

Así las casas (muletilla patrocinada por el ahora discreto, pero no por eso menos escandaloso Grupo Higa), en esta elección sí tenemos un candidato de ultraderecha y ese candidato es del PRI. Oiga Mikel, ¿y ya ensayó la suástica en sus banderas? Obvio: una suástica pequeña y discreta para atraer a los admiradores del nacional socialismo, le cuentan a Gilga que hay muchos en la ciudad, en cantidades nada despreciables. Es que de veras, levanta usted una piedra y aparece un trepador.

Oigan esto: “Muchas mujeres han decidido abortar porque no han tenido la información adecuada, por ello aseguro que al llegar a la Jefatura de Gobierno se brindará a las capitalinas todos los elementos para tomar una decisión informada y también se creará la secretaría de la familia y la procuraduría de la mujer”. En estas instituciones se darán terapias para curar el lesbianismo, esa enfermedad que se multiplica e impide que las buenas conciencias vivan sin amenazas. Gamés trepida.

Gil piensa (sí, ya comenzaron las jactancias) que Arriola debe volver al Frontón México a dar su discurso incendiario; al mismo tiempo, debe asistir a las marchas con su cesta de jugador de pelota vasca. Gil ha visto a Mikel en la jaula de los pelotazos y lo hace muy bien. Se hubiera quedado allí en lugar de salir a mostrar una de las caras más ridículas de estas campañas. Y miren que hay algunas.

Más información: http://bit.ly/2I4XBCg

También te puede interesar