El líder de transportistas de carga Jesús García, irrumpió la tarde del miércoles en la sesión de cabildo, para denunciar presuntos actos de corrupción en la organización de la edición 2017 de la Feria de Cuernavaca.
El quejoso es padre de Juan Manuel García, empresario que tenía a su cargo la realización del evento, cancelado luego de su asesinato en abril de 2017.
Refirió que el alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco, le había dado la concesión de dicho evento a la firma GB, propiedad de su hijo y posteriormente, los regidores simularon una licitación para ceder los derechos a la empresa Dicasa, la cual pagó un “moche” de un millón 300 mil pesos.
Entrevistado al respecto por el periódico Reforma, el regidor de Turismo, Jorge Dada Guerrero, señaló que en noviembre de 2016 se creó una comisión para lanzar una convocatoria abierta y elegir a los organizadores de la Feria de Cuernavaca, donde resultó ganadora Dicasa, sin embargo, los empresarios García informaron en rueda de prensa que por acuerdo directo con el alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco, se les otorgaron a ellos los derechos.
Después de esta decisión, Dicasa demandó al Ayuntamiento un reembolso por los gastos que ya había realizado para publicidad, y a fin de detener por incumplimiento, la firma GB pagó un millón 300 mil pesos.
No obstante, el regidor aseguró que aun cuando los convenios de los García fueron directos con el alcalde Cuauhtémoc Blanco y la empresa Dicasa, el cabildo hará lo posible para que le sea reembolsado un porcentaje al quejoso.
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